El presidente salvadoreño Nayib Bukele y el exmandatario estadounidense Donald Trump han cerrado un acuerdo que redefine la gestión carcelaria internacional. La denominada “MEGA CÁRCEL”, símbolo de la guerra contra las pandillas en El Salvador, será utilizada para albergar prisioneros provenientes del sistema penitenciario de Estados Unidos, incluyendo ciudadanos norteamericanos.
Este acuerdo implica que El Salvador recibirá una compensación económica por aceptar reos estadounidenses, lo que, según el gobierno salvadoreño, servirá para fortalecer su infraestructura penitenciaria. Sin embargo, la medida ha generado cuestionamientos sobre los derechos humanos y la legalidad de trasladar presos a cárceles fuera de su país de origen.
El pacto refuerza la estrategia de Bukele de convertir a su nación en un referente de la mano dura contra la delincuencia, mientras que para Trump representa una alternativa a la crisis carcelaria en Estados Unidos.
Queda por ver cómo evolucionará este acuerdo y qué repercusiones tendrá para ambas naciones en materia de justicia y soberanía.
Por JAC
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